México y EE.UU. acuerdan frente común contra cárteles, entre soberanía y dependencia
En un acto que busca mostrar unidad ante un problema compartido, México y Estados Unidos anunciaron la creación de un grupo de alto nivel para coordinar estrategias de seguridad y enfrentar al crimen organizado transnacional.
El anuncio se dio tras la visita del secretario de Estado norteamericano, Marco Rubio, quien se reunió con la presidenta Claudia Sheinbaum y su gabinete. En la mesa estuvieron temas urgentes: tráfico de drogas –con el fentanilo al centro de la conversación–, tráfico de armas, migración irregular, robo de combustible y lavado de dinero.
La narrativa oficial
La presidenta Sheinbaum celebró el acuerdo como un paso histórico en la cooperación bilateral, mientras que Rubio reiteró que el gobierno estadounidense no puede frenar la epidemia de opioides sin el compromiso de México. Ambos gobiernos insistieron en que este esfuerzo no es de subordinación, sino de corresponsabilidad.
El debate interno
Sin embargo, las críticas no tardaron en surgir. Analistas y organizaciones civiles cuestionan si esta alianza realmente fortalece la soberanía mexicana o si, por el contrario, coloca al país bajo la presión constante de la agenda de seguridad de Washington. La experiencia de décadas pasadas recuerda que estas estrategias suelen priorizar los intereses del vecino del norte, dejando de lado los problemas internos que más afectan a la población mexicana.
Contexto regional
El anuncio ocurre en un momento tenso: apenas días después de una operación militar estadounidense contra un buque venezolano vinculado al narcotráfico y con un despliegue naval activo en el Caribe. Para algunos, esto es prueba de que la cooperación viene acompañada de presión geopolítica, y no solo de voluntad diplomática.
Lo que está en juego
Mientras la narrativa oficial celebra acuerdos internacionales, la ciudadanía mexicana sigue enfrentando la violencia en sus comunidades, la corrupción en las instituciones y la impunidad que da oxígeno a los cárteles. La pregunta es inevitable: ¿este grupo de alto nivel traerá resultados tangibles para el pueblo mexicano o será otro gesto diplomático para la foto?
En En Contacto Noticias creemos que la verdadera soberanía no se mide en comunicados conjuntos ni en cumbres internacionales: se demuestra en la capacidad del Estado para proteger a sus ciudadanos dentro de sus fronteras. De poco servirá contener el tráfico de fentanilo hacia Estados Unidos si, en casa, las familias mexicanas siguen atrapadas entre la violencia, el miedo y la indiferencia política.